Todo comenzó con un viaje a Europa, donde Jesús Briseño descubrió la enorme variedad de cervezas que el mundo tiene para ofrecer. Esta experiencia despertó en él una pregunta: ¿por qué en México no existe esta diversidad? Así nació la historia de Cerveza Minerva, una historia que inspira a luchar contra lo establecido, replantear el camino al éxito y tomarse las cosas en serio.